La mujer es el centro de la vida

Por Dr. Arturo Olivares Cerda

Soy un convencido de que las mujeres de México merecen un mejor trato, una mayor justicia social y laboral, un reconocimiento amplio y profundo de su valor y su papel en nuestro entorno cotidiano.

Este día, donde conmemoramos el Día Internacional de la Mujer es una gran ocasión para levantar la voz e invitar a los actores de gobierno, partidos políticos y sindicatos a trabajar en una cruzada en favor de una mayor igualdad entre las mujeres y los hombres.

Una igualdad que permita reducir las brechas en tantos campos como el laboral.

En el salarial.

En el trabajo no remunerado.

En el acceso a los beneficios de la seguridad social.

En el acceso a una educación de excelencia.

Y al derecho de ser madre y trabajadora a la vez en las mejores condiciones posibles.

También debemos fortalecer medidas que blinden a la mujer de cualquier acto que atente su integridad y su dignidad.

Como sociedad no podemos tolerar agresiones de ningún tipo.

La mujer merece todo nuestro respeto y admiración.

De ella se genera la vida.

De ella emana la familia.

De una mujer, todos, de su mano, crecimos.

Fuimos formados.

Fuimos vestidos.

Fuimos encaminados hacia una profesión para adquirir las mejores herramientas para conducir por nosotros mismos nuestro proyecto de vida.

Y que curioso, una mujer nos trajo a la vida, y es con otra mujer con quien iniciamos la formación de una nueva familia.

Siempre la mujer.

Por eso digo que la mujer es el centro de la vida.

A las trabajadoras del Instituto Mexicano del Seguro Social muchas gracias por todo lo que nos dan en el plano profesional y personal.

Su calidad humana y su enorme sentido de responsabilidad han construido, junto con los demás trabajadores del instituto, un IMSS grande, con un presente valioso y con un futuro alentador.

El mejor capital con el que cuenta el seguro social es su capital humano.

Un capital humano compuesto por 60 por ciento mujeres.

La mujer ha jugado un papel preponderante en la lucha contra Covid-19.

Todas, absolutamente todas han hecho que esta batalla tan dolorosa no nos haya vencido.

Su talento profesional ha curado a miles de pacientes.

Su humanidad ha permitido a muchos no sentirse tan solos en su lucha por sobrevivir.

En una guerra como la que libramos, el toque femenino se vuelve clave para no vencerse.

Su sensibilidad, perseverancia, su ternura han hecho que muchos no desfallezcan en su misión cotidiana de curar y salvar vidas.

Muchas gracias por todo eso.

Sin ustedes, la historia seria distinta.

A las trabajadoras de nuestra estructura sindical, a las que laboran en nuestras oficinas centrales de la Ciudad de México, a las que trabajan en las 37 secciones sindicales del país, a cada una, mi gratitud por su trabajo esmerado todos los días.

Su desempeño laboral permite que hagamos una defensa eficaz de nuestro Contrato Colectivo de Trabajo.

Su trabajo permite salvaguardar los derechos laborales adquiridos y diseñar nuestras estrategias para ir por más mejoras para todos.

A las mujeres de nuestro Centro de Capacitación y Calidad, en la Ciudad de México y en cada uno de los estados del país, gracias por ser portadoras de conocimiento en favor de la clase trabajadora.

Su compromiso con la capacitación y su constante preparación nos permite fortalecer las habilidades de nuestra fuerza laboral para beneficio de millones de mexicanos.

Amigas y amigos:

En el Día Internacional de la Mujer pasemos de las palabras a las acciones.

Fomentemos el diseño de nuevas políticas internas en el IMSS y en nuestra organización gremial que impulsen la participación más activa de las mujeres.

Generemos códigos de respeto y buen comportamiento que protejan a todas las trabajadoras.

Promovamos el equilibrio entre el trabajo y la familia.

Es indispensable que la mujer ejerza su derecho de alcanzar sus sueños sin renunciar a sus anhelos de ser madre y ver crecer a sus hijos.

En una sociedad moderna, con acuerdos claros y la corresponsabilidad de las partes, todo se puede.

En mi gestión, la mujer tendrá un lugar especial.

En mi Comité Ejecutivo Nacional tengo mujeres que ejercen responsabilidades de alto calado.

Nuestro sindicato cuenta con mujeres al mando de secciones sindicales.

Nuestro gremio tiene a mujeres en puestos clave en las Comisiones Seccionales y en las Representaciones Sindicales en las Comisiones Nacionales Mixtas.

Es hora de modificar nuestra mirada hacia el papel de la mujer en nuestro entorno.

Es tiempo de hacer valer sus derechos.